Seguramente has escuchado el término Transfobia en las últimas dos décadas, principalmente porque se han logrado visualizar diferentes problemáticas asociadas a personas sexualmente diversas.
Pero ¿la Transfobia realmente existe? y si existe ¿cómo afecta la salud mental de las personas Trans?
Iniciemos haciendo una conceptualización del término Trans. Dentro de las siglas LGBTIQ+, la T abarca diferentes términos transgeneristas (travestis, transformistas y transexuales).
Las personas identificadas como transformistas son personas que se visten de la manera tradicional a un género diferente. Esto puede hacerse para hacer un performance con fines de protesta o para realizar un espectáculo.
Las personas que practican el travestismo se visten del género opuesto con un nivel más afectivo que las personas transformistas. Su propósito es sentirse como parte de un género diferente.
Las personas transexuales tienen una identidad de género que no es la misma de su sexo biológico y por lo general, desean realizar su transición al generó con el que se identifican.
Teniendo estos conceptos claros, pasemos a hablar de la Transfobia. La Transfobia es una forma de discriminación que abarca apatía y en ocasiones odio hacia las personas que se identifican como transexuales, transformistas o travestis.
Colombia es el segundo país latinoamericano con más casos de homicidio hacia personas trans. Desde noviembre del 2021 a noviembre del 2022 se registraron 22 muertes violentas de mujeres trans, sin contar las muertes que no se registran.
Históricamente son la parte de la comunidad LGBTIQ+ que más sufre de discriminación. En Colombia la expectativa de vida de una mujer trans es de 35 años. Con todas estas cifras podríamos considerar que la Transfobia tiene gran presencia en nuestro País.
Esta discriminación no solo se percibe en tasa de mortalidad y violencia, también en la estigmatización de lo que debe o no hacer laboralmente una persona trans, en las preguntas ofensivas sobre sus genitales u orientación sexual, la prohibición de habitar ciertos espacios públicos, entre otras.
Con todo esto podemos entender cómo se perjudica la salud mental de personas trans.
Perjudica en todos los sentidos, primero porque afecta todas sus áreas de ajuste como la laboral, social, espiritual, académica, pareja y familiar. En todas estas áreas vemos diferentes grados de discriminación y segregación ante esta comunidad, siendo las personas trans más propensas a la depresión, ansiedad, dismorfia corporal, ideación o conducta suicida e incluso llegar a consumarlo.
Es por esto que es necesario preservar la salud mental y física de toda la comunidad trans, asegurando el acceso a servicios de salud mental de calidad y sin discriminación.
Si eres profesional en salud mental debes garantizar un trato de calidad y dignificante para todos tus pacientes, incluidos los miembros de la comunidad. Evitando hacer preguntas victimizantes o discriminatorias que no tengan que ver con el motivo de consulta y teniendo un trato asociado a la identidad de género que expresa el consultante.
Si eres miembro de la comunidad es importante que accedas a un proceso psicológico con el que te sientas aceptado y validado, así como reportar a las autoridades cualquier clase de abuso y discriminación. Lo puedes hacer en la Línea Diversa al número 3108644214, línea telefónica destinada para reportar cualquier caso de discriminación por sexualidad diversa.